Fabricada en Brasil, y desde donde llegaría entre finales de este año o comienzos de 2024.
Se trata de la primera pick-up de la marca desarrollada fuera de EEUU.
Inicialmente, serán 3 las versiones de la gama para el vecino país: Rebel, Laramie y R/T. Disponible con un motor turbodiésel 2.0 de 170 CV y 380Nm (ya conocido en Toro) y un naftero 2.0 de 272 CV y 400Nm denominado Hurricane 4. En ambos la caja es AT9 y la tracción, 4×4.
Para la gasolera la capacidad de carga será de 1.015Kg y 750Kg para la naftera. Buen equipamiento de confort y varias asistencias al manejo.
La Rebel y Laramie, siempre hablando de la gama brasileña, ofrecerán ambos motores, mientras que la R/T solo naftera.
El posicionamiento de la Ram Rampage será en lo alto del segmento intermedio. Irá directo contra la Ford Maverick, por encima de Toro, Oroch y Montana, y por debajo de las pickups medianas con chasis. No olvidemos que estamos hablando de una pickup monocasco con todo lo que ello significa en cuanto a comportamiento, confort y también limitaciones (no pudiendo ser carrozada a gusto y necesidad del propietario).
Basada en la plataforma SmallWide, la misma que usan Toro, Renegade, Compass y Commander. Comparte la distancia entre ejes con la Toro (2,99 metros), aunque es algo más larga (5,03 metros, 8 cm más) y más ancha (1,89 metros), incluso en las trochas (4 cm más).
La gama para Argentina aún se está configurando y sería un poco apresurado adelantar cómo estará compuesta. Una posibilidad es diferenciarla de la Toro eliminando las versiones gasoleras, pero hay que ver cuáles son las configuraciones que permitirá la planta de Goiania en Brasil para los mercados de exportación.
La idea de la filial argentina, dependiendo como siempre de la economía nacional y de las restricciones a la importación, es traerla entre fines de este año y comienzos del próximo.
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